La vida no es mas que un interminable ensayo, de una obra que jamás se va a estrenar...

Seguidores

viernes, 7 de enero de 2011

Alguien tan poco convencional.


No se quien soy, pasan los años  y no logro descifrarme.
Tengo la imagen clavada en mi mente de estar en un gran agujero tapada de basura sin poder moverme o salir. Todavía no se que elegí. Todavía no se que quiero. No me quiero rendir. No quiero bajar los brazos, no quiero mas ser pesimista, estoy tratando de dejar ese lado oscuro de mi. Tomo y sigo tomando pastillas que alivian mi dolor interno “momentáneamente” hacen que me olvide de toda la basura que siento por dentro.
¿De donde vengo? ¿Hacia donde voy? No tengo ninguna referencia de la vida. No tengo norte, y tampoco sur… trato de orientarme pero me eh pasado mi vida entera buscando no se que cosa, hasta ahora no la eh encontrado, y sigo tan vacía como el primer día.
Vacío. Soledad. Tristeza. Es todo lo que siento. Nudos y mas nudos no se quieren desatar. Y cuando algo no quiere desatarse mas vale no insistir.
Dentro de mí existen miles de personas parecidas a mi, no se con cual quedarme, no se cual de todas ellas soy yo, o quizás ninguna me agrade…
Paso mis días entre libros, mato mi tiempo leyendo interminables capítulos de la vida misma, me instruyo literalmente en todos los aspectos. Pero al mismo tiempo siento que no tengo nada, que no se nada de la vida.
Aguantar la respiración debajo del agua es mucho mas fácil que esto, verán por que se los digo, vivo por ese algo, por esa única meta que me mantiene acá. Me mantiene lúcida y a la vez me desquicia.
Lo único que hago para momentos como este es cerrar fuerte los ojos, imaginarme un lugar, país, pueblo, lago, océano… me imagino allí, recorro sus caminos, huelo sus aromas, siento su tibieza, me quedo allí por un buen rato  y  luego todo empieza a calmarse…